La era de los negocios digitales
Colaborador del IES USAT
Consultor, mentor y catedrático
Especialista en Gestión empresarial e innovación
Cuando pensamos cómo era una empresa hace algunas décadas, se nos viene a la mente un amplio local con una persona -que generalmente era el dueño-, ubicado en la entrada esperando a los clientes. O detrás de un mostrador en el cual se exhibían los productos que más se comercializaban.
La pregunta es: ¿qué tanto cambió nuestro recuerdo con la actualidad? Sin duda, si analizamos todos los sucesos de los últimos años a nivel mundial, por supuesto que las variaciones son significativas, pues ya no realizamos las mismas actividades. Uno de los factores más determinantes y que contribuyeron a ver los negocios de diferente manera es la globalización.
La apertura de fronteras entre países permitió que se transfirieran productos y servicios al alcance de las personas. Sin embargo, lo que más valoro de este intercambio, son los conocimientos adquiridos. Es decir, muchos profesionales pudieron trasladarse de un lugar a otro dando a conocer sus experiencias, y mostrando los grandes logros que su nación tiene y que pueden replicarse en otras ciudades.
Es así que, hoy en día, las compañías han adoptado procesos, insumos, herramientas y tareas de diferentes partes del mundo, que les permiten ser más competitivas y lograr acercarse más a los clientes por medio de la entrega de artículos hechos a la medida, teniendo en cuenta: gustos, colores, variedad, tamaños, precios, utilidad, entre otros beneficios.
Esta era digital en los negocios trae consigo grandes oportunidades para los líderes. Por ejemplo, ayuda a administrar de una forma más eficiente la información de los colaboradores, así como del público objetivo. Se podría implementar una base de datos solo para los clientes, donde se incluya sus datos personales, tales como: nombres y apellidos, dirección, correo, teléfono y fecha de nacimiento. De esta manera, podríamos saber fácilmente cuándo es su cumpleaños y sorprenderlo con un regalo entregado a domicilio. Con esta iniciativa lograremos una satisfacción aún mayor de la que ya tenía el comprador logrando su fidelización.
Asimismo, esa data podría incluir datos referentes al proceso de adquisición: qué día y hora prefiere visitar el establecimiento, qué producto o servicio compró y su cantidad. Del mismo modo, cómo hizo la operación de pago, ya sea en efectivo, utilizó tarjetas o transferencia. También conocer el lugar de compra, pudiendo ser por medio de redes sociales, en el local, página web o aplicaciones. El propósito de obtener toda esta información es lograr acercarnos más al consumidor, ofreciéndole la mejor experiencia de compra, y que perciba el trato y esfuerzo que ponemos en cada uno de nuestros visitantes.
El trabajo remoto es otro gran beneficio y se desarrolló más en pandemia, debido a que ayuda a ahorrar en gastos operativos: energía eléctrica, agua potable, internet, materiales de oficina, mantenimiento de equipos e infraestructura. A su vez, mantiene al equipo motivado, pues diferentes estudios indican que las personas son más felices trabajando desde casa que en su centro laboral, pues les permite administrar sus tiempos, compartir más con la familia, y ahorrar en transporte y alimentos. Es importante tener en cuenta que, para un correcto funcionamiento de esta política laboral, los colaboradores deben haber sido previamente capacitados en tecnologías de información.
Por último, otra gran ventaja de adoptar la tecnología es el incremento de ingresos que se da en la empresa, por comercializar los productos a través de diferentes medios digitales: redes sociales, aplicaciones, páginas web, anuncios publicitarios en cines o paneles interactivos.
De esta manera, invito a los emprendedores a adaptar su negocio al mundo digital, pues es el camino que los llevará a lograr sus objetivos. Gracias.